Besamanos, algo tan anunciado en Don Benito y que tan pocas veces se realiza. Generalmente acaban siendo sustituidos por un besacinta o besamedalla.
Gran parte de la religiosidad popular se basa en contacto directo de los fieles con las Sagradas Imágenes. Poder rezar delante de ellas o tocarlas es una manera de acercarse espiritualmente a Cristo, la Virgen y/o los Santos.
No sé que hace pensar a algunos encargados de las Hermandades y Cofradías dombenitenses que una cinta con medalla puede sustituir lo anteriormente citado. Además resulta mucho más vistosos los altares montados para la ocasión de los Besamanos, que el simple hecho de colgar una cinta de la mano de una Imagen en el sitio que recibe Culto habitualmente.
Posiblemente en la próxima Cuaresma la Virgen de los Dolores, de la Hermandad de la Buena Muerte, volverá a tener Besamanos. Nuevamente podremos disfrutar de una estampa tan bella como la de la fotografía y mirar directamente a los ojos de la magnífica talla de Sebastián Santos Rojas.
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